Declaración del Movimiento Continental Latinoamericano y Caribeño de Solidaridad con Cuba
El Movimiento Continental Latinoamericano y Caribeño de Solidaridad con Cuba denuncia la espuria publicación de la revista colombiana Semana del día 16 de enero pasado. En este sentido, nos solidarizamos con nuestros compañeros del Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba (MCSC), que han sido calumniados y expuestos vilmente al escarnio por el citado pasquín.
El «documento secreto» que la revista publica tiene la clara impronta del Departamento de Estado de los Estados Unidos y se suma a las agresiones del régimen estadounidense contra Cuba.
Expresamos nuestra preocupación por la integridad física de nuestros compañeros y compañeras del MCSC, habida cuenta del accionar paramilitar y represivo del Estado colombiano hacia los militantes sociales y populares de ese pueblo hermano. Responsabilizamos a la revista Semana por lo que pueda ocurrir a partir de esta artera nota.
Es ridículo y risible que expresen preocupación por supuestos planes de Cuba para interferir en las elecciones del año próximo en Colombia. Son temores propios de la impotencia de los EEUU que ven cómo se diluyen sus planes de anexión de América Latina y el Caribe por la propia incapacidad de lograr condiciones de vida digna para nuestros pueblos. Nadie más que los neoliberales y fascistas son responsables del fracaso de su proyecto político. Y es justo que los pueblos se resistan al saqueo, la prepotencia, las amenazas, el chantaje, las injerencias, los golpes de Estado, las falsas noticias y el endeudamiento escandaloso de nuestros países para sostener el financiamiento del gasto armamentista de EEUU. Los pueblos se organizan para derrotar en el terreno político a los imperialistas y sus socios.
Cabe recordar que el gobierno de Colombia sí se ha inmiscuido en asuntos internos de otros países. Lo hicieron y hacen contra el legítimo gobierno de Venezuela, organizando en su territorio bandas paramilitares de venezolanos y mercenarios que se alistan al mando de asesores norteamericanos.
También es bueno remarcar que el expresidente Álvaro Uribe, mantiene negocios con paramilitares y el narcotráfico, fue quien cedió soberanía al abrir paso a la instalación de siete bases militares de EEUU, que «escuchan y monitorean» objetivos geopolíticos extraterritoriales de la Patria de Gaitán.
Son aliados del país que organiza, financia y protege el terrorismo internacional. El que cometió magnicidios como el de Patrice Lumumba, Sadam Husein, Muamar Gadafi y Salvador Allende, entre tantos. También es responsable de 634 complots y atentados para asesinar a Fidel Castro. Desde sus Embajadas se financiaron golpes de Estado en Nuestra América y se invadieron países de nuestro continente, como Panamá, Granada, Nicaragua y Guatemala. Son los que sostuvieron el apartheid en la República Sudafricana y fueron derrotados por el pueblo sudafricano, la fuerza política de Nelson Mandela y los internacionalistas cubanos que combatieron junto a los independentistas africanos.
Los pueblos giran hacia las políticas populares, progresistas y de izquierda porque sueñan y quieren vivir un mundo mejor. Un mundo que no puede siquiera prometer la derecha neoliberal y fascista. La tercera ola neoliberal en el continente comenzó a debilitarse en México, luego en Argentina. En Bolivia el golpe orquestado por Trump pudo sostenerse por 10 meses, porque el pueblo boliviano luchó para el retorno de su líder Evo Morales y apoyó ampliamente a los candidatos del MAS IPSP. En Venezuela, por enésima vez, el bravo pueblo venezolano ratifica su rumbo apoyando mayoritariamente el legado de Hugo Chávez, arrasando en las elecciones legislativas en que se impuso el PSUV.
Dejen de mirar la paja en el ojo ajeno y vean la viga en el propio.
Quienes hacemos solidaridad con Cuba, lo hacemos desinteresadamente, sin recibir nada a cambio. Sólo por el hecho de defender la autodeterminación de un pueblo que eligió echar a los lamebotas del imperio que cedieron independencia a favor de los EEUU, incluyendo la enmienda Platt en la Constitución, permitiendo la instalación de una gran base militar norteamericana en Guantánamo, convirtiendo a la isla en prostíbulo, nido de la mafia y el narcotráfico de los EEUU. Quienes realizaban falsos positivos y ejecuciones extrajudiciales contra el pueblo cubano. Asesinando a militantes estudiantiles y sociales. Organizando persecución política, que contaban con bandas parapoliciales, que recibían órdenes directas del Embajador norteamericano y que llenaban las cárceles de presos políticos.
La Revolución cubana emocionó a los humildes, a los trabajadores, a los justos, a las mujeres y hombres de bien, y nos brinda un ejemplo invalorable para pensar un mundo mejor.
Por la lucha contra el analfabetismo, por la salud pública y no arancelada para todo el pueblo, por el programa de alfabetización Yo Si Puedo, por la Operación Milagro que devolvió la visión a miles de latinoamericanos y caribeños, por la Escuela Latinoamericana de Medicina que permitió que miles de jóvenes de la Patria Grande, que no tenían posibilidad alguna de cursar la universidad en sus propios países, lo hicieran en Cuba. Pero, fundamentalmente, por la plena convicción de que la dignidad humana plena se puede alcanzar con el Socialismo.
En plena pandemia del COVID 19 y, con el ensañamiento del presidente Donald Trump contra Cuba, diseñando patrañas y mentiras para agudizar el bloqueo genocida y terrorista para poner de rodillas y sumir en profundas necesidades al pueblo cubano, en ese marco, Cuba envió profesionales de la salud a más de 40 países en el planeta. La Brigada Médica Cubana Henry Reeve ha colaborado para atenuar los efectos letales de la COVID. Este simple ejemplo no ha sido tomado por ninguna potencia global. EEUU, con todos los recursos disponibles, no ha enviado un solo médico para ayudar a aliviar la angustiosa situación del colapso en los sistemas precarios de salud de muchos de nuestros países.
En todo el planeta existen los Comités, Movimientos Nacionales de Solidaridad con Cuba y sus respectivas casas. Nos vinculamos con el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblo, donde logramos establecer un intercambio cultural, social y político como ocurre con todas las relaciones de intercambio con organizaciones de otros países. Estamos compuestos por una gran diversidad de representaciones; políticas, sociales, sindicales, estudiantiles, religiosas, campesinas y contamos también con grupos de parlamentarios amigos de Cuba en casi todos los países del orbe.
El !CAP es presidido por Fernando González Llort, quien fuera injustamente encarcelado en el año 1998 junto a otros cuatro cubanos que luchaban contra organizaciones terroristas que tenían asiento en el Estado de La Florida, en EEUU.
Cuba ha padecido de actos terroristas, con un saldo de más 3 mil muertos y más de 2 mil mutilados o discapacitados, muchos de estos actos organizados y financiado desde los Estados Unidos y con el beneplácito de ese gobierno.
En el juicio a los CINCO, el Gral. Edward Atkenson expresó que Cuba necesita ojos y oídos en La Florida. El presidente del ICAP, Fernando González Llort es un Héroe de Cuba y de América Latina y el Caribe, ya que nos defendía de las acciones terroristas que desde allí se gestan hacia Cuba y todo el continente americano.
Por todo lo expuesto, rechazamos todas y cada una de las acusaciones y falsedades emitidas en la publicación de la Revista Semana, del 16 de enero de 2021. Nos solidarizamos con el Movimiento Colombiano de Solidaridad con Cuba y denunciamos esta amenaza y escarnio que hacen de nuestros compañeros solidarios.
Exhortamos a los Organismos de Derechos Humanos de todo el continente, a la Comisión lnteramericana de Derechos Humanos, a la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, a denunciar este accionar capcioso de la Revista Semana, de Colombia.
Nuestra América, 17 de enero de 2021
Movimiento Continental Latinoamericano y Caribeño de Solidaridad con Cuba