El Encuentro Antimperialista, de Solidaridad, por la Democracia y contra el Neoliberalismo demostró que la solidaridad y la lucha permanente son hoy la alternativa a la dominación capitalista, tal y como aseguraron sus participantes.
Más de mil 300 de representantes de movimientos sociales y organizaciones solidarias de 86 países debatieron en el habanero Palacio de Convenciones sobre los desafíos actuales y trazaron la hoja de ruta conjunta.
Condenaron políticas asfixiantes como el bloqueo económico contra Cuba, se solidarizaron con los pueblos de Chile, Ecuador, Brasil y otros que permanecen en la calle en defensa de sus derechos.
Asimismo, rechazaron la agresión de Washington y sus aliados contra el programa cubano de colaboración médica, una de las expresiones más nobles del espíritu solidario e internacionalista de la Revolución cubana.
La declaración final del evento incluyó la necesidad de avanzar en una mayor unidad para defender los derechos, la soberanía e independencia de los pueblos y mantener las acciones para exigir la libertad del exmandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva.
Ratificaron su apoyo a los procesos democráticos de Venezuela, Bolivia y Nicaragua, amenazados por la injerencia de Washington y la derecha internacional en los asuntos internos de esos países. (PL)